martes, 24 de diciembre de 2013

Por fin camino a la playa

Como relaté en la entrada pasada, iba en camino a Ko Samui, una isla tailandesa, cuando tuve que quedarme en Singapur pues no tenía visa para Tailandia. Se me olvidó por completo que necesitaba una, y me tocó esperar del sábado hasta hoy martes para que me la dieran. Obviamente el domingo no trabajan y el mínimo que requieren para expedirla es dos días, así que mandé a mi marido y mis hijos a la isla y me quedé esperando.

Como es época de Navidad, el sábado no me podían garantizar asiento en el vuelo de hoy y a la angustia de la visa se unió la incertidumbre por la fecha de salida. Me dieron ticket para el 25 en la noche, pero igual me vine directo de la embajada con mi visa nuevecita. El Niño Jesús se apiadó de mí y me dió el hermoso regalo de poder ir hoy a reunirme con mi familia. Casi como una película de Navidad. 

Si se van a quedar accidentados en alguna parte, accidéntense en Singapur. Me encantó la ciudad. Ya la conocía un poco por haber pasado por aquí en otras ocasiones camino a otros lares, pero ésta vez pude recorrer los lugares menos obvios. 

Me quedé en un hotelito en la sección india de la ciudad. Al principio lo ví con malos ojos - tal vez por el despecho - pero en realidad, la habitación estuvo limpia y la cama muy cómoda. El hotel no ofrece desayuno ni tampoco piscina o gimnasio, pero está en el centro de Little India y me encantó el ambiente. 

Tomé muchas fotos malosas que no voy a montar, excepto por éstas dos. La primera es temprano en la mañana en una de las avenidas de Little India porque me encantan los colores. La otra es un mercado de souvenirs. Si se fijan bien, el dios elefante hindú está al lado de un buda chino y probablemente por ahí hay un ídolo malayo también. Esa convivencia es emblemática de los singaleses.




Ahora pronto me reuniré con mi familia y podré celebrar la Navidad de verdad verdad. ¡Felices fiestas a todos! 

domingo, 22 de diciembre de 2013

Accidentada en Singapur

Después de haber sobrevivido un viaje de 8 horas en una nevera ambulante soñando con las vacaciones tailandesas que empezarían hoy, me he quedado accidentada en Singapur.

Resulta que los venezolanos necesitamos visa para entrar a Tailandia, y a mí se me olvidó ese detalle. Solo lo recordamos cuando estábamos camino al aeropuerto ayer sábado en la mañana. El itinerario para el viaje iba de Tianjin a Singapur, y de allí a Ko Samui, una hermosa isla al sur de Tailandia, donde pasamos una semana demasiado corta el año pasado. Me tocó quedarme en Singapur para pedir visa en la embajada. Mi marido y mis hijos continuaron a Ko Samui. Mejor que disfruten ellos allá mientras yo resuelvo mi problema.

Si hay que quedarse accidentado en alguna parte del mundo, Singapur es excelente. Conseguí un hotel relativamente barato en la sección india de la ciudad y pasé el día de turista.

A final del día me encontré con una amiga singapurense que vivió en Tianjin. Ella fue la catequista de mis hijos cuando se prepararon para su primera comunión. Hace dos años que se mudó a Hong Kong pues al marido lo trasladó la empresa allá. Con ella fui a misa, luego a cenar y finalmente de compras al centro comercial Mustafa, un mercado enorme donde se consigue de todo.

Mañana en la mañana iré temprano a la embajada tailandesa. La página web de la embajada avisa que no otorgan visas el mismo día de la solicitud y que el mínimo es dos días, pero que durante las temporadas feriadas se tarda más. Ojalá me tengan lástima y me apuren el tramite, porque por más que me gusta Singapur, dejar a mis hijos sin madre en Navidad por tarada es triste.

El Merlion es símbolo de Singapur. 


De pingüinos y neveras ambulantes



Pasamos la primera semana de nuestras vacaciones en Wanlong, nuestro resort de esquí habitual. El resort estaba de aniversario, 10 años desde que abrió sus puertas, por lo que seguramente se ganó temperaturas templadas y días asoleados.

Wanlong debe ser como se dice "la montaña favorita de los Fitzgerald" en chino porque hemos sido fieles visitantes desde que abrió en el 2003. Scott fue por primera vez en enero de la primera temporada, y desde entonces hemos ido por lo menos cuatro veces al año, casi siempre trayendo un montón de amigos. Desde hace tres años Scott ha guiado un campamento de esquí para niños. El primer año lo hicimos dos veces, una semana por vez, pero eso fue demasiado, y desde entonces ha sido tan sólo una semana en diciembre.

Este año el campamento nos quedó tan bueno como siempre. Digo nos quedo porque a pesar de las promesas de Scott de que yo no tenía que hacer nada sino preparar a mis hijos para el campamento, terminé siendo una de las instructoras. No es que me quejo porque ha sido una linda experiencia, pero al fin y al cabo es trabajo tener que seguir un horario y entrenar a un grupo de niños. Por lo menos éste año el frío estuvo tolerable -- o será que ya he aprendido a vestirme para la montaña.

Tuvimos cuatro días y medio de sol y nieve perfecta. No hizo demasiado frío ni hubo demasiado viento. Han habido viajes a Wanlong donde nos hemos quedado dentro de la habitación el día entero porque los vientos huracanados alejaron a todos menos los esquiadores más apasionados como Scott. Esta vez,  hubo frío por supuesto, pero bien vestidos no hubo mayor problema.

Después de una semana linda y orgullosos por un trabajo bien cumplido, nos montamos en el autobús que contratamos para regresarnos a Tianjin. Immediatamente notamos un problema. Al autobús como que le faltaba combustible, sobre todo en las subidas. Resulta que la gasolina no fluye bien cuando está fría. Por eso hay aditivos especiales que se le agregan cuando uno maneja en bajas temperaturas. Desgraciadamente, el chofer, mezquino como muchos de su generación, no compró el aditivo porque le pareció caro y tuvimos que manejar a media potencia por casi tres horas hasta encontrar una gasolinera que lo vendía. Allá lo compró porque lo obligamos.

Con la gasolina medio arreglada (porque el aditivo debe haber sufrido de la misma falta de control de calidad que tienen tantos otros productos chinos a la venta en el país), continuamos el viaje. Ya la temperatura estaba bajando porque la tarde iba avanzando. Resulta que la calefacción estaba dañada y pronto empezamos a sufrir de frío dentro del autobús. El chofer nos dijo que la calefacción solo funciona cuando no hay frío. ¡Cómo para matarlo! Encima de pichirre, burlón.

Pasamos casi 5 horas con la temperatura interior del autobús en 5 grados. La exterior era 0. Fue espantoso. Nos tocó vestirnos con todo lo que teníamos para aguantar y aun así, llegamos medio congelados a Tianjin. Bastante irónico, que después de no haber sufrido del frío en plena montaña, estuviéramos convertidos en pingüinos regresando a casa en esa nevera ambulante.

Menos mal que ahora estoy en camino a nuestra vacación tropical, pues vamos a pasar dos semanas en la isla de Ko Samui en Tailandia. Arena, mar y sol curan lo que sea. 

sábado, 14 de diciembre de 2013

Peces, lechosa, huevos y miel

Estoy de vacaciones de Navidad. Ayer, para celebrar el fin de curso, fuí con dos compañeras de trabajo al spa de los peces roedores. No había ido en mucho tiempo, y está mejor que nunca.

Remodelaron las baños, la piscina de los peces y el comedor. Antes era limpio y bonito, pero ahora todo está de lujo. El precio ha aumentado de 68RMB a 89RMB, que no es mucho considerando que la entrada dura por 24 horas, incluye tres comidas y el uso de todos los espacios. Las bebidas y los masajes son aparte, pero valen la pena.

Nosotras nos brindamos un masaje. La última vez me dieron uno que llaman, "de leche y miel." Yo pensé que iba a ser con una crema humectante llamada "de leche y miel," pero no. Salí de ahí con olor a galleta porque en lugar de humectante, me echaron un litro de leche y un tarro de miel, y con eso me dieron un masaje riquísimo.

Esta vez, yo quería el mismo y se lo había recomendado a mis amigas, pero las masajistas no me entendían. La negociación terminó con la oferta de un masaje con "mu gua," que yo entendí era de fruta tropical.

Nos enviaron a ducharnos y cuando regresamos, habían cubierto las camas del masaje con unas sábanas de plástico y sobre el plástico habían roto cuatro huevos que estaban mezclando con lechosa (papaya) triturada y miel. Con eso nos masajearon por 40 minutos y al terminar, nos envolvieron en el plástico y nos mandaron para el baño de vapor. Una maravilla.

Después del super masaje tropical, los pececitos roedores casi fueron anticlimáticos. Como cuando iba hace 5 años no dejaban tomar fotos, no me llevé el teléfono así que la foto que acompaña la tuve que buscar en flickr. Ayer tuvimos 28 mil más peces que los que se ven aquí, pero me gusta el efecto de contraluz.


dr fish 2


Como si el súper masaje y los pececitos no fueran suficientes, la cena fue riquísima. Yo sufro de indigestión y le tengo alergía a muchos alimentos, así que estaba resignada a comer arroz blanco nada más. Redecoraron el comedor para que parezca un mercado, con tarantines para los diferentes tipos de alimentos. El tarantín de la entrada fue el mejor en mi opinión. 

Tenía una variada selección de repollos, coles y demás hojas verdes para uno escoger. También había diferentes tipos de hongos y queso de soya. Uno escoge lo que uno quiere y se los da a la encargada que los cocina en agua hirviente y los devuelve a los 2 minutos. Entonces se le agregan salsas y condimentos de un bar muy variado, y a comer. Yo comí col rizada, repollo chino, hojas de crisantemo y diente de león, hongos que llaman aquí "de oro" y tiritas de queso de soya. A eso le puse una salsa de ajonjolí y un poquito de aceite picante, ajo y cilantro. Súper saludable y exquisito. Tengo que regresar para tomar fotos y poder pedir algo así en todos los restaurantes chinos donde vaya. 

Nos vamos de China, asi que tengo que aprovechar a regresar al spa. Fue la despedida perfecta a un largo trimestre escolar. Seguramente que lograré encontrar muchas otras ocasiones de aquí a junio para volver. Mi único pesar es que perdí la oportunidad de ir cuando visitaron mi mamá y mi amiga Lidia

Ya sé para cuando me llegue la próxima visita. Aprovechen a venir. Tienen hasta junio, pero si vienen después de marzo tienen que traer saco de dormir porque el flete tiene que salir en marzo, y nos quedaremos sin camas. 

martes, 10 de diciembre de 2013

Ahora sí nos vamos

Titulo alternativo: Del Lejano Oriente al Medio Oriente todavía es medio lejano

Pues ahora sí, es oficial. Nos vamos. Conseguimos trabajo en Egipto, en Cairo American College, un colegio internacional de primera clase.

Chefrem's Pyramid
Foto de  Dorli Photography via Flickr.com
Nosotros vivimos en Egipto hace 17 años. El colegio donde trabajábamos no era éste donde trabajaremos, sino más bien uno pésimo, con fines de lucro y sin deseo alguno de educar. Era caótico. La cosa era tan mala que a la hora del recreo, yo salía a pasear por el medio de donde los alumnos de la secundaria jugaban fútbol con la esperanza de que me dieran un pelotazo y con eso tener excusa para no regresar al salón.

El colegio era horrible, pero vivir en Cairo fue una aventura maravillosa. Viajábamos con frecuencia al Mar Rojo y a otros países en la región, participamos en la liga de softból y el coro de aficionados, conocimos muchísima gente súper interesante, y visitamos cuanto templo antiguo y moderno pudimos. Ahora que vamos a regresar a trabajar en el mejor colegio de la ciudad estamos muy emocionados de volver.

Sí, hay problemas en la región. Sí, hay disturbios. Pero, ¿dónde no hay problemas? De la China nos vamos huyendo de la temible contaminación y las restricciones del Internet. Cada lugar tiene sus problemas; vivir es lucha.

Todavía nos quedan 7 meses en China. Voy a sacarles el jugo porque lo más seguro es pasará mucho tiempo antes de que regresemos. Dejaremos muchos amigos y muchos recuerdos, y sobre todo muchas gracias por todas las maravillas que nos brindaron aquí.




domingo, 6 de octubre de 2013

Ponquecitos sin gluten

Otra receta.

Esta es una adaptación de una que aparece en Healthy Gluten Free Cooking, por Tammy Credicott. Ese recetario me gusta porque las recetas son fáciles y deliciosas. En la mayoría de las recetas son pocos los ingredientes. Como saben, le tengo alergía al trigo, el gluten, los lácteos, los huevos, a veces la soya, y recientemente he descubierto que a las manzanas también. Pues las hijas de la autora tienen las mismas alergías que yo (pero no a las manzanas porque nada más a mí se me ocurre ser alérgica a las manzanas) y por lo tanto puedo hacer casi que todas las recetas en el libro. Eso no pasa a menudo con mis recetarios.

Estos ponquecitos los hice ya una vez. La Sra. Credicott amablemente agrupa los ingredientes en "húmedos", "secos", y "otros." La primera vez que intenté la receta leí "otros" y entendí "opcionales." Pues no eran opción; de verdad que hicieron falta. Quedaron comestibles pero no sabrosos.

Esta vez leí la receta con cuidado. Lo único es que pedía manzanas ralladas y yo las reemplazé con calabacín. Salieron menos dulces, pero así le gustan a mi papá. Si alguna vez se las hago, le van a gustar.  Tuve que dejarle el puré de manzanas porque eso lo incluyen para que reaccione con el polvo de hornear y ayude a leudar. Voy a tener que experimentar un poco a ver con que lo reemplazo. 

Aquí la receta enmendada. Las harinas son un poco esotéricas si uno no come sin glúten. Supongo que podrían sumar todas las cantidades y reemplazarlas con harina de trigo, pero ese experimento lo harán ustedes con intestinos normales. Ah, y ella pide que todo sea orgánico pero yo uso lo que consigo.




Ingredientes secos
  • 3/4 taza (90g) de harina de arroz integral
  • 1/4 taza (30g) de harina teff (un cereal etíope)
  • 1/2 taza (60g) de almidón de papas
  • 1/2 taza (60g) de almidón de tapioca (creo que tapioca es yuca)
  • 1/2 cdta goma de xantano
  • 1 cda canela molida
  • 2 cdta bicarbonato de soda
  • 1 cdta de polvo de hornear
  • 1/2 cdta de sal
Ingredientes húmedos
  •  1/4 taza (60ml) de miel
  • 1/2 taza (120ml) de aceite de coco
  • 1/2 taza (90 g) de azúcar moscabada
  • 1 cda de vainilla
  • 1/4 taza (60ml) de puré de manzanas a temperatura ambiente
  • 2/3 taza (160ml) de agua tibia
Otros (En inglés ella los llama add-ins.)
  • 1/2 taza(50g) de coco rallado
  • 3/4 taza (110g) de nueces picaditas  Nunca me han gustado así que me hice la loca.
  • 2 zanahorias ralladas (aunque yo nada más tenía una)
  • 1 calabacín rallado (aquí pedía 2 manzanas pequeñas ralladas, peladas y sin semillas)
  • 3/4 taza (110g) de cranberries secas remojadas en un poquito de agua con ron
  • un puñado de goji berries, por recomendación de mi acupunturista que dice que se lo ponga a todas las comidas. Creo que es para mejorarme la circulación.)
Procedimiento
  1. Se mezclan los ingredientes secos y se apartan. 
  2. Se mezclan los ingredientes húmedos hasta que estén bien combinados. 
  3. Se agrega la vainilla y el puré de manzanas. 
  4. Se agregan los ingredientes secos lentamente. De ser necesario, agréguese un poco de agua hasta obtener una consistencia "normal" de masa de ponques, o sea gruesa pero que todavía se pueda vertir. Tal vez no se necesite toda el agua y hasta tal vez no se necesite del todo.
  5. Agréguese el coco, los vegetales y los cranberries. 
  6. Viertase en tacitas de ponque. Se hornea en un horno a 350 grados F (175 grados C) por 25 minutos hasta que un palillo de dientes metido en el ponque salga limpio. 
Estos ponquecitos los congele la última vez y resultaron muy prácticos para llevarlos al colegio. También se les puede cubrir con nevado de queso crema. Otro experimento para los alegres sin-alergía.

viernes, 4 de octubre de 2013

La que me gusta

China tiene dos grandes murallas.
  1. La Gran Muralla - maravilla arquitectónica construída para proteger a China de los mongoles. Es Patrimonio Mundial de la UNESCO y una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno. Mi sección preferida es Jingshanling, donde hacemos camping en las vacaciones de octubre, cuando China celebra su aniversario como república popular. 
  2. La Gran Muralla Electrónica - restricciones al Internet que impone el gobierno chino pensando que así va a controlar el paso de información. Algunos se las arreglan para pasarle por debajo y otros aceptan que el gobierno así los protege de la pornografía y los disidentes. 
A mí me gusta solamente la primera. De la segunda mejor no decir nada.

Como todos los octubres, junto a varias otras familias nos fuimos a hacer camping a la pata de la Gran Muralla. Llevábamos dos familias nuevas y dos familias repitientes. El año pasado hizo mucho frío y otra gente que había viajado con nosotros no se animó. No tenían que haberse preocupado; la temperatura permaneció suficientemente baja como para espantar a los mosquitos pero sin requerir más que un suéter liviano. Eso sí, el cielo nublado, pero el color gris fue color de neblina y no de contaminación. 

Como siempre, los típicos problemas al inicio. Un caucho espichado en el autobús nos obligó perder dos horas a la salida, y luego a la entrada del parque, renovaciones nos obligaron a bajar todo el equipo y trasladarlo en tres viajes sobre un carrito eléctrico del hotel. Menos mal que una vez instalados nos olvidamos de todo.

El lunes subí a la Gran Muralla con mi familia, y luego, en honor a mi madre a la que practicamente tuvimos que arrastrarla para que se bajara, en la tarde volví a subir. Tuve la cámara de verdad, pero no he descargado las fotos todavía, así que aquí les dejo las fotos del teléfono.

Las puse en éste librito electrónico de FlipSnack, pero gracias a la segunda muralla, yo no logro verlo. Avísenme si sale bien. Si no, lo cambio. Las fotos en blanco y negro porque la neblina no nos brindó cielo azúl.


domingo, 29 de septiembre de 2013

De nuevo a la Gran Muralla

Salimos dentro de poco a acampar al pie de la Gran Muralla. Tal vez es la última vez, así que a disfrutarlo.

Estamos de vacaciones por el aniversario de la fundación de la república. Tenemos una semana, y tengo planes de hacer muchas cosas:

  • subir la Gran Muralla dos veces al día por tres días
  • ir al mercado de las telas para mandarme a hacer mi disfraz de Halloween
  • visitar la Calle de la Antigüedad
  • mandar un par de paquetes por correo 
  • ir a IKEA
  • estudiar para mi penúltimo curso porque tengo una tarea pendiente el domingo
  • leer mucho
Aquí lo que estaré mirando por tres días. ¿Se fijaron en el azúl del cielo? Yo sí, porque aquí en Tianjin el cielo y el aire están grises de contaminación. 


Jingshanlin to Gubeikou Great Wall

martes, 24 de septiembre de 2013

Se van acabando

Estoy enviciada con un programa de televisión, Castle. Se trata de un escritor, Richard Castle, que empieza a acompañar a una detective de policía para investigar cómo es el trabajo policíaco pues está pensando escribir otra novela. Ella no lo soporta al principio y por supuesto que se enamoran mientras van resolviendo crímenes. Voy por la quinta temporada y me queda tan sólo un episodio. La estoy viendo por internet chino, un episodio tras otro. Me tardé dos meses. Ayer debutó la sexta temporada en EEUU, pero esa sí me la voy a tener que ver semanalmente como los demás mortales. Mi hijo me prometió que ahora nos enviciaremos con House. Esa serie duró ocho temporadas o sea que tengo hasta Navidad.

A Castle lo empecé a seguir por recomendación de mi amiga Lidia, que estuvo de visita durante el mes de agosto. Juntas empezamos desde el primer episodio y nos instalábamos a ver por lo menos dos casi todas las tardes. Gracias a Castle a mis hijos le salieron sendos cojines tejidos y a mí un "bol" para frutas porque Lidia hace crochet.

Lidia también hace origami y lo hace muy bien. Es profesora de origami en dos colegios en Caracas, y en el mío. Aquí se presentó varias veces con diferentes grados y le debo una carta de agradecimiento. De regalo nos dejó dos hermosas y complicadas esferas hechas en origami, además de una fiebre por doblar papel compartida por muchos de los niños. Esa visita se nos acabó demasiado pronto.



También se nos está terminando nuestra estadía en China. Hoy justamente el director del colegio envió a todos unas planillas que debemos entregar si queremos firmar contrato para el año siguiente. Tenemos 13 años en China y creo que ya está bueno ya. Estamos pensando regresar a EEUU, para estar mas cerca de la familia y para cargarnos las pilas de cultura occidental.

Los 13 años en China y 17 en el extranjero han sido maravillosos, pero todo lo bueno tiene que acabar. Así lo valoramos mas. Nos llevamos de China una hija adoptada de souvenir, hermosos recuerdos y un curriculum vitae impresionante.

P.D. Otro final que se acerca: Me quedan sólo dos cursos para terminar la maestría de biblioteconomía, el que empezó ayer y uno más. Nada más me tardé cuatro años en sacar esta maestría. Esta bien. Para graduarme de ingeniero me tarde 13 años.

martes, 6 de agosto de 2013

Esto, esto, esto y esto

El viernes pasado nos despedimos de esto

para venirnos a ésto


Y como eso no fuera poco, ayer me desperté a media noche a encontrarme con ésto



Los arreglos a las tuberías que deberían haber hecho durante nuestra ausencia, no los hicieron completos y la casa sigue disolviéndose. 

Casi que me dan ganas de mudarme permanentemente a esto. 


lunes, 29 de julio de 2013

Y nos vamos otra vez

Salimos para China mañana de madrugada. Tenemos la esperanza de que sea el último año allá y que no veamos éste puente hasta agosto.



El puente es el Sagamore Bridge, el cual une a Cape Cod con el resto del estado de Massachussetts. El abuelo de Scott trabajó en su construcción. La compañía de él armó los pilones reinforzados que mantienen el puente. Cada vez que pasamos por el puente, Scott se persigna y encomienda a Grandpy Lavelli al cuidado de Dios.

Cuando pasamos el viernes en la noche estaba lloviendo. Podríamos suponer que es un mensaje del cielo, que los ángeles están tristes que nos vamos de Cape Cod, pero en realidad, cuando pasamos en dirección contraria en junio también estaba lloviendo así que no, es simple accidente meteorológico. Igual, me salió bonita la foto tomada y editada con mi teléfono.


Para que se ubiquen. Pasamos el verano en el pueblo de Truro que es tan pequeño que el número 6, el de la autopista, lo cubre completamente. 

Escribo de nuevo del otro lado del planeta. Hasta entonces.

martes, 23 de julio de 2013

El secreto de la chola

Mi hermano me pasó un clip en Youtube donde una latina explica el infalible método de la chola, que supuestamente explica porque los niños hispanos en EEUU son tan bien educados, je je. Aquí se los pongo. (En Venezuela, a la chancla le llamamos chola o chancleta y por eso es que el epígrafe de ésta entrada es diferente al título del video clip.)




A mi hijo le pareció comiquísimo -- posiblemente porque a él nunca le he dado un cholazo  -- y ha adoptado el secreto como chiste. Cuando su hermana se pone muy dificil, él mueve los dedos como si estuviese lanzando una chola y hace el ruidito, "fliu fliu fliu."

Las cholas mías permanecen bajo mis pies porque no empleo el secreto de la chancla sino para hacer chiste. En cualquier caso, mis cholitas Havaianas ya están tan suavecitas de tanto uso que no servirían. Me las puse para montarme en el avión de Miami a Boston el 24 de junio y no me las he quitado. Les toca vacaciones a las cholas en una semana pues comienzo a trabajar el 1ro de agosto. Ayyy, me van a hacer falta mis cholitas.




martes, 9 de julio de 2013

Hay de todo

Hoy cumplimos dos semanas en la casa camper. A excepción de una noche donde pasamos calor hereje, ha sido toda una aventura. Ya hemos aprendido a convivir de cerquita, algunos con más paciencia que otros (Sí, Andreína es contigo. Deja a tu hermano tranquilo que no es culpa de él que tenga las piernas tan requete largas.)

La camper está estacionada a la pata de una colinita que nos da sombra y que además nos dará frutas. 

Moras. 



Blueberries - lo siento que la foto no salió bien enfocada



Uvas de playa



Mafafa - o por lo menos se parece mucho a marihuana - tampoco que la vamos a cosechar si fuese, o si hubiese más que esta sola matica. 



Como ven, hay de todo. Ahora a recordarle a mis hombres que cuando orinen detrás de la camper, porque son hombres y como les gusta mear contra un árbol, apunten al árbol y no las frutas. 

sábado, 6 de julio de 2013

Playeros

Estamos disfrutando de la playa como nunca -- porque la casa camper es demasiado acalorada durante el día.

Vamos a llegar a China irreconocibles de lo bronceados que estaremos. A la ayee no le va a gustar. Me va a regañar por haberle quemado la tez blanca de Michael. Ni modo, en la playa hay brisa y frescura, y además, nos toca un tremendo puesto de estacionamiento.  

jueves, 27 de junio de 2013

Hogar dulce hogar

Estamos instalados en el pueblo de Truro, MA, donde hemos pasado todos los veranos de la vida de Michael, con la excepción del último cuando mi marido estuvo recuperándose de cirugía.

Llegamos ayer en la tarde, a encontrarnos por primera vez con el camper que será nuestro domicilio por los próximos 32 días. 



El camper tiene 6 metros de largo y dos y medio de ancho. El puesto en el campamento nos permite tener electricidad y agua, pero no desagüé. Tenemos un tanque para el agua sucia, pero cuesta 25 dólares vaciarlo, así que el plan es usar el baño del campamento y el grifo que tiene el puesto. 



El camper nos los prestó un amigo de mi cuñado y nos sale gratis. Tenemos que pagar alquiler al campamento y el registro automovilístico. Sale más barato que alquilar casa de playa. Scott quería pasar el mes entero en una carpa pero me negué categóricamente. Menos mal porque hoy, apenas a 24 horas de llegar, ha llovido desde las 2 pm y el pronostico promete más. En carpa seria un martirio esté aguacero -- en realidad, con el camper tan solo un poco mejor. ¡No hay donde moverse! Ojalá no nos toquen muchos días de lluvia. 

Normalmente a Scott le dan vivienda por ser salvavidas pero este año estamos en una playa diferente porque nos quedamos apenas cuatro semanas. Con  esta playa  la vivienda corre por nuestra cuenta, y en Cape Cod son demasiado caros los alquileres. 

El mantra para los 32 días es "a disfrutar de la aventura." Las camas hay que armarlas todas las noches, transformando la mesa del comedor, el sofá y unos gabinetes en camas sorprendentemente cómodas. Hay que comprar comida a diario porque la neverita es pequeña. Tengo una cocina a gas con horno y todo, pero tan poco espacio que no provoca cocinar. Compramos una pequeña parrilla a gas para cocinar afuera más bien. La tenemos afuera sobre la mesa de picnic, donde también hemos puesto el microondas. El camper tiene enchufe externo. La parrilla cocina como las cocinitas de juguete, pero tal vez eso sea porque todavía esta nueva. Lo único que he intentado hasta ahora ha sido salchichas. A ver como nos va mañana. 

Total que todo una verdadera aventura. Tengo planeado pasar casi todo el tiempo en la biblioteca pública o la playa, para pasar poco tiempo dentro del camper y no desencantarnos con él. 

Alberto Grau siempre dice, "en veinte años nos reiremos." Me conformo con poder reírme en 34 días. 

domingo, 23 de junio de 2013

Van 2 y fueron 18

Parece mentira, pero hoy empieza nuestra tercera semana de vacaciones. Sé que no debería quejarme pues nos tocan 7, pero cónchale, ¡qué recontra rápido está pasando el tiempo!

La primera semana la pasamos en casa de mi suegra, recuperándonos del jet lag y respirando profundo del aire limpio.


La segunda semana la pasamos en Florida, primero en Disney y ahora en Miami hasta el lunes en la mañana.

Esta foto que tomamos ayer y commemora la primera vez que estamos reunidos los Crespo Leal desde hace 18 años cuando salimos mi hermana, mi mamá y papá y yo de Venezuela. ¡Ojalá no pasen otros 18 años más!


Mas fotos en flickr.

domingo, 16 de junio de 2013

Arepas viejas

Cuando uno vive como nosotros, sin un hogar fijo, uno tiene maletas bien usadas. En año nuevo, nunca salgo a caminar con las maletas a ver si logro no montarme en un avión ese año, pero no funciona.

Algunas maletas nos gustan más que otras. Nuestras favoritas son unas de la tienda deportista Decathlon, pero hemos tenido muchas.

Buscando otras cosas en nuestra casa en NH, Scott encontró su bolso de golf. La última vez que usó esa bolsa fue en Florida, donde Scott jugó golf con su tío. Eso fué hace 4 o 5 años. Después de ese viaje a Florida, la bolsa quedó almacenada hasta hoy.

Dentro de la bolsa encontramos dos bolsas de Harina Pan, compradas en Miami en ese viaje. Sorprendidos me fijé en la fecha de vencimiento, y mayor sorpresa todavía, ¡la Harina Pan no vencerá hasta el 2019!

Igualito me supieron a gloria las dos arepitas que me comí ésta mañana.



martes, 11 de junio de 2013

Borracha con oxígeno

Estamos de vuelta en EEUU después un largo pero fácil viaje de vuelta. Cada vez que nos montamos en el avión recuerdo lo mucho que no me gusta volar. Sigo orando porque alguién descubra la teleportación.

Ahora en casa de mi suegra por unos días. Mi marido me dice a cada tres segundos, "¡Huele el oxígeno!" Nos ha hecho mucha falta respirar profundo pues Tianjin ha tenido la peor contaminación que hemos conocido en 12 años. Justamente éste año hemos empezado a fijarnos en los índices de calidad de aire, y ahora sé porque las fotos de Tianjin siempre me salen tan apagadas. ¡Es el aire que pinta todo de gris! No, mejor ni pensarlo. Me concentro más bien en respirar profundo y oler el oxígeno.

Espero poder regresar a un horario mas frecuente de montar entradas ahora que estoy fuera de la Gran Muralla Electrónica de China. Nos vemos pronto.

P.D. Estaré en Miami del 20 al 24 de junio. Si también están a ver si nos vemos, avísenme.

En la casa de mi suegra en New Hampshire. ¡Lindo y verde!



sábado, 8 de junio de 2013

Si el Anecdotario tuviese cuenta de Twitter

Twitter es una red social que permite a uno montar comentarios cortos, hasta de 140 caracteres alfanuméricos. Empezo hace como cinco años y ha crecido exponencialmente. Hoy en día todo el mundo tuitea. Seguro uds. saben más que yo de eso porque encerrada tras la Gran Muralla Electrónica, nos enteramos tarde de los avances. Sí sé que se usa el arroba para dirigir un comentario a otra persona y el # para designar una palabra clave que puede ser utilizada para encontrar otros tweets similares.

En cualquier caso, si El Anecdotario tuviese cuenta de twitter, ésto es lo que yo escribiría:

Lunes, 3 de junio de 2013 -  86 caracteres
Nos faltan 6 noches normales y 1 eterna (porque no duermo en avión) para llegar al otro lado del planeta.  #soñando
Martes, 4 de junio de 2013, 10 am - 91 caracteres
Lo peor de ser #bibliotecaria es tener que reclamarle a la gente que no devuelve los libros a tiempo. #gruñona
Martes, 4 de junio de 2013, 11:30 am - 130 caracteres
 Lo mejor de ser #bibliotecaria es cuando vienen niños súper emocionados porque la mamá les firmó la planilla de permiso para llevarse 10 libros para las vacaciones.
Miércoles, 5 de junio de 2013, 9 am - 42 caracteres
Nos quedan tres días para que terminen las clases.
Miércoles, 5 de junio de 2013, 9 pm - 106 caracteres
El proyecto final de mi curso de literatura juvenil nos quedó lindo. Visíten aquí: http://steampunk-wiki.wikispaces.com. 
 Miércoles, 5 de junio de 2013, 9:05 pm - 106 caracteres
Buenas noches. A soñar con la tragantona que me voy a dar en Miami cuando visite a mi hermana. 
Jueves, 6 de junio de 2013, 6 am - 37 caracteres
Dos días y dos noches más. #noestoycontando
Viernes, 7 de junio de 2013, 9:45 am - 106 caracteres
El año se termina a las 11:45 am y todavía faltan tres alumnos sin regresar sus libros. !No les sale boleta! #masgruñonatodavía
Viernes, 7 de junio de 2013, 12:05 pm - 73 caracteres
De bromita llegó la última en entregar el libro. !Con ella cerramos! Feliz vacaciones. #lafotoestámasabajo
Viernes, 7 de junio de 2013, 4 pm - 124 caracteres
Despedirse bien de alguien querido es un arte que a pesar de que la vida de expatriada me obliga a practicar, no logro dominar. #adiosaotraamiga
Sabado, 8 de junio de 2013, 1 pm - 83 caracteres
@maridomio, ¿tienes los pasaportes e itinerarios? Yo traigo a los chamos y los cepillos dentales.
Sábado, 8 de junio de 2013, 6 pm - 80 caracteres
@maridomio, pasa por el cajero. Gasté todo el efectivo que tenía en un mercado libre de Beijing.
Sábado, 8 de junio de 2013, 8 pm - 45 caracteres
 ¡Felicitaciones @AnecdotariodeFitzianita por la 500va entrada!

Sábado, 8 de junio de 2013, 8:15 - 101 caracteres
Llevo 10 minutos tratando de publicar ésta entrada y la @GranMurallaElectronicadeNOÑA no me deja!!! #gruñonadenuevo
 Sábado, 8 de junio de 2013, 8:25 pm - 88 caracteres
Tate, @GranMurallaElectronicadeChina, un día de éstos te van a tumbar. Vas a quedar pisadita pisadita. #comomevoyacontentar
#lafotoqueprometíalláarriba #sevetantriste Descansa @mibiblioteca. Hasta agosto.


 P.D. Esta es la 500va entrada de veras. Nada mas me tardé 7 años en llegar a éste hito.

P.P.D. Yo tuiteo de verdad con el nombre fitziane. Es más que todo en inglés y sobre biblioteconomía, pero están bienvenidos a seguirme.

lunes, 3 de junio de 2013

Lo que escribió mi hermano

Esto lo escribió mi hermano en Facebook en la víspera de las elecciones en abril. Me gustó mucho pero no me dio tiempo para montarlo hasta ahora.

Gracias, Quelito, por prestármelo.

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No me gusta ver como Venezuela está dividida. Ahora resulta que tener orgullo en su nación también es malo.

Yo no voy a votar en contra de la gente que sigue al gobierno. Yo voy a votar porque quiero ver aquella Venezuela donde crecí. Gente de distintos partidos políticos podían estar juntos sin tener que golpearse o insultarse. Magallaneros, caraquistas y güaristas se chalequeaban porque su equipo no ganó el juego de la noche anterior. Pero no pasaba mas de un chiste.

Donde una vecina le cuidaba los hijos o hijas de la que vivía al lado mientras esta iba de compras y además le trae cualquier cosa que necesitara. Un país donde podías salir a caminar sin tener que voltear a ver si alguien te viene siguiendo para atracarte. Donde la gente decía: "buenos días" con una sonrisa. ¿Por qué tenemos que insultar si tenemos puntos de vista diferentes?

Muchos nos quedaremos en este país gane quien gane. Otros se iran. Espero que el distanciamiento entre los VENEZOLANOS se cierre y construyamos una patria grande. Muchos le darán Like y otros quizás me eliminen como conocido de FB. No lo escribo con esa intención. Lo escribo porque sentí la necesidad de hacerlo. Que tengan buenas noches y un mejor mañana.

martes, 9 de abril de 2013

Chimichurri

Otra receta facilita: chimichurri con perejil y ajo.

Aquí en China me cuesta encontrar perejil. Cilantro encuentro facilmente y menos mal, porque a mí me gusta mucho, pero perejil es más dificil. Ayer en mi mercado libre de verduras encontré perejil, y pude intentar ésta receta que tenía tiempo ojeando. Yo no soy de esas cocineras que le echan un poquito de ésto y otro poco de aquello y todo les queda riquísimo. Yo tengo que fijarme bien en las recetas para no perder los ingredientes, y después del pequeño milagro de conseguir perejil, no quería arriesgarme a tener que botarlo.

La receta es del libro Daisy Cooks, por Daisy Martinez. Daisy es latina que tiene un programa de cocina en PBS en EEUU. El libro lo tengo desde hace un par de años. Me gustó tanto que tengo dos copias, una aquí en China y otra en EEUU para tenerlo durante el verano. Las recetas son por lo general sencillas y llenas de sazón latina, y los ingredientes son fáciles de encontrar - excepto por ají dulce que uso deshidratado gracias a los amables oficios de María Luisa Lares, que me lo consigue en Venezuela y me lo manda con mi mamá.

Búscando el link para ponerlo aquí, me estoy enterando que Daisy tiene dos libros más, uno para fiestas y uno con comidas diarias, y que también uno de sus libros está en español.  Mejor termino la entrada para comprarme los dos libros.

Chimichurri - yo en Venezuela a ésto le decía mojito verde pero ese puede haber sido nombre inventado por mí.

1/2 cebolla blanca, pasada por el procesador de alimentos
1 taza bien llenita de perejil chino (probablemente no importa si se usa el perejil rizado, pero del rizado aquí en China si que no hay.)
1 taza de aceite de oliva (yo le puse un poco menos porque me pareció mucho)
el jugo de dos limones
4 dientes de ajo
Sal al gusto

Aquí me desvío un poco de las instrucciones del libro que dicen que se mezcla todo en una fuente porque ni mi marido ni mi hijo se lo comen si ven las hojas del perejil.

1. Primero pasé la cebolla por el procesador hasta que quedó bien trituradita
2. Le agregué los demás ingredientes directamente al procesador y lo molí todo por un par de minutos.
3. Lo serví con bistec encebollado - también de una receta de Daisy - pero lo que hacía falta aquí era yuca or hallaquitas de masa. (Eso sí sería rico, pero aquí no se consigue yuca ni estamos en temporada de jojoto para comprar hojas de maiz. Para eso tengo que esperar hasta agosto. ¡Ojalá la temporada de perejil coincida con la del maíz!)

No quedó nada de la cena sino los platos sucios así que ésta mañana posé ésta naturaleza muerta para ilustrar la entrada. Después agarré el perejíl, un par de rebanadas de jamón cocido y unas tortillas mejicanas para desayunar tostadas con jamón y chimichurri que me quedaron súper ricas.





sábado, 6 de abril de 2013

Tres lecciones de un parque de diversiones

Estamos de vacaciones por una semana. Me quedan nada más hoy y mañana, y el lunes de nuevo a trabajar, pero ¡cómo hemos disfrutado!

Cada día de la semana hemos salido a pasear. A Andreína es mejor rodearla de amigas para que no atormente al hermano. A él no le hace tanta falta socializar. A él lo saco a pasear para que mueva más que los pulgares. Si lo dejo pasa el día completo en frente de la cónsola de juegos.

El lunes fuímos a un parque de diversiones llamado Happy Valley. Me llevé a dos vecinas para Andreina y un amigo para Michael. Además, vino mi nueva amiga mejicana con sus tres hijos. Fernanda está en la clase de cuarto grado de Andreína y son amiguísimas. Las vecinas están en sexto grado y son más grandecitas.

Al llegar al parque, la división fue muy natural. Michael, su amigo y las dos niñas (creo que a una de ellas le gusta Michael) se fueron por su lado. Andreína y yo nos quedamos con la familia mejicana. Es por eso que Andreína sale en todas las fotos.

Aprendí tres cosas:
  • Cuando un parque está vacío le falta energía y emoción. Ese parque estaba bastante solo porque fue día de semana para los chinos. Justamente escogimos ir cuando nosotros estábamos de vacaciones y los chinos no para que no hubiese colas en las atracciones, pero francamente, la próxima vez vamos un fin de semana normal y aceptamos el precio de esperar un poco más para montarnos. 
  • Soy aguada y mediosa. No me gustan las montañas rusas ni otros aparatos parecidos. Yo, fotógrafa en el parque. Me monté una vez con Andreína en una de esas tacitas que dan vuelta y me pareció eterno el turno. No, eso no es conmigo. Esa tacita fue la última vez que me monto en un aparato de esos.
  • Tengo que practicar más con ésta cámara nueva. Me gusta mucho, pero no sé operarla. La camarita en el iPhone me tiene mal acostumbrada con lo fácil que es. Con ésta cámara grande, tengo que pensar. Hmmmmm. 

Aquí una cajita feliz con las fotos, pero antes, mi foto favorita del día. Valió la pena la mareada por disfrutarla con mi hija.






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jueves, 28 de marzo de 2013

Desde Rusia con amor ??

Me han estado llegando muchos comentarios spam. Cada vez que alguien deja un comentario en esta bitácora, Blogger me envía un email para dejármelo saber. Últimamente no he actualizado con regularidad, y casi todos los comentarios que me llegan son basura. Inmediatamente sé que son basura porque están en inglés machacado. De cinco que se ven aquí en mi iPhone, tres son anónimos y spam.



 Me puse a hurgar en las estadísticas que nos da Blogger y encontré que en Rusia tengo muchos lectores. Hoy ya ha bajado a quinto lugar, pero la semana pasada estaba en primer lugar. Eso es extraño porque en primer lugar es un fenómeno reciente que me lean en Rusia. La mayoría de mis lectores siempre han estado en EEUU y Venezuela.  En segundo lugar, no conozco de nadie que me lea en Rusia. Claro que uno nunca sabe quien lee lo que uno escribe en el Internet, pero seguramente si tuviese un aficionado tan fiel en Russia me dejarían comentarios en castellano, ¿no creen?

Ay, me acabo de dar cuenta que escribí Rusia en inglés. Como dirían mis alumnos estadounidenses, oops!

Para evitar los comentarios basura, Blogger le da a uno muchas opciones, entre las cuales está el odiosísimo código de verificación. Sobre todo ahora que me está atacando la presbicia, es difícil leerlo. Menos mal que también uno puede negarle comentarios a lectores anónimos. Desde que seleccioné esa opción el sábado no he recibido ningún comentario basura, asi que espero que con eso sea suficiente. 

¿Dónde se selecciona esa opción? Blogger lo explica aquí. 

En la página de Settings (el mío está en inglés pero eso también se puede cambiar), uno escoge "Entradas y comentarios." Hay que pasar la sección de las entradas hasta la sección para comentarios, y ahí uno dice quien puede comentar. 


 Si me estás leyendo en Rusia, déjame un mensajito de verdad, por favor, y bienvenido.


domingo, 24 de marzo de 2013

A punta de agua

Hoy es Domingo de Ramos. Hoy se celebra la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, después de cuarenta días de ayuno en el desierto. La Cuaresma recuerda ese ayuno. Hoy en la iglesia católica celebraremos con ramos de pinos en lugar de palmas porque es lo que hay.

Yo tengo varios años haciendo ayuno de azúcar para la Cuaresma. Admito que no soy católica sino presbitereana, y ayuno de Cuaresma no es algo que practicamos. También admito que no hago el ayuno por que soy particularmente religiosa. Lo que pasó es que vivimos en el Medio Oriente por cuatro años y allí conocí a muchos musulmanes.

Los musulmanes hacen ayuno en el mes de Ramadán. Eso sí es fuerte. Durante Ramadán, comen una vez al día, después de la puesta del sol. Entonces tienen el iftar, y si alguna vez tienen la suerte de ser invitados a iftar, no dejen de aceptar. Cuando nos invitaban a nosotros, hacíamos ayuno ese día para respetar el ayuno de nuestros anfitriones. No vayan a pensar que era cada iftar es un enorme festín, pero uno se sienta con mucho ánimo a comer y compartir.

Una de mis amigas musulmanas me explicó que el ayuno de Ramadán es para entender en carne propia lo que sufren los pobres, que no tienen sino para comer una vez al día. Hasta el agua se niegan durante Ramadán porque en muchas partes del Medio Oriente el agua es lujo. Mi amiga también dijo que si deja de comer para rebajar le cuesta mucho, pero que en Ramadán como es en solidaridad como los pobres, no le da tanta hambre durante el día.

Asi que es por eso que yo ayuno, en solidaridad con todos los que no ayunan por decisión consciente sino por realidad diaria. Dejar de comer azúcar durante la Cuaresma es duro, y después del Domingo de Resurrección, me sabe demasiado dulce. El ayuno me ayuda a darme cuenta del exceso de azúcar que consumimos y de lo afortunada que soy de poder consumirla sin preocuparme por el costo o su falta.

Eso sí, es difícil y éste año decidí que en lugar de dejar de comer azúcar, iba a dejar de tomar líquidos que no fueran agua. A mi sorpresa, mi hijo, que se cree ateo, prometió unirse.

Dentro de todo, nos ha ido bien. El estaba tomando mucho refresco (gaseosas), practicamente una botella diaria de Fanta o Coca Cola, y cuando no tomaba refresco tomaba jugo de manzana. Su papá lo acostumbró al bendito jugo de manzana a pesar de mis quejas. En el mes que lleva, se le ha aclarado la piel (le habían salido muchas espinillas como es normal en adolescentes) y admitió que ahora le gusta el agua.

Yo tengo varias medicinas que tengo que tomarme en agua y que le dan sabor. Como son medicinas, me las permito. Aquí en China, cuando le dan agua a uno en los restaurantes, a menudo es agua con limón y eso también me lo permito. Michael ni eso. Si no es pura agua, no se lo toma.

Mi ayuno terminará después de la misa del Domingo de Resurrección. Michael dijo que el ayuno de él termina el sábado. Andreína le dijo que tiene que aguantar hasta mediodía. Ella habló por metida y mandona, pero él se lo aceptó.

Michael me sorprendió ayer diciendo que el año que viene quiere volver a ayunar, que fue difícil pero que hacer sacrificio tiene valor. Yo estaba explicándole a alguien las razones para mi ayuno y él le propuso a su hermana y a su papá que se unieran con él a hacer ayuno de trigo, "para vivir lo que vive mi mamá todos los días." Le tengo alergía al trigo y es mucho lo que no puedo comer. Que él quiera vivirlo conmigo es mas dulce que cualquier bebida azucarada.

Last Day on Koh Samui 2012 
Esta foto es de diciembre, y no tiene casi nada que ver con la Cuaresma - aparte de lo del azúcar -, pero ahí está mi hijo y así tenemos algo para el "Quizas también le interese."

viernes, 22 de marzo de 2013

Probando

Sé me esta llenando el blog de comentarios basura así que tengo que hacer algunos cambios. Ya les contaré.

viernes, 22 de febrero de 2013

Parillita coreana en el restaurante japonés

A mi marido, mi hija y a mí nos gusta mucho la comida japonesa. En agosto abrió un restaurante japonés cerca de la casa y cenamos allá unas dos veces al mes.

A Andreína le gusta el sashimi de salmón, a Scott el de atún, y a mí el de mero. A los tres nos gustan los frijoles de soya envainados (edamame) y los vegetales en tempura, sobre todo la batata. También nos gustan los sushi roll, especialmente los que tienen aguacate o semillas de ajonjolí por fuera. Nos gusta el wasabe, el jenjibre encurtido y la sopa de miso.

A mi hijo no le gusta tanto. El es carnívoro. Eso de comer algas no es con él, y cuando vamos come solamente milanesa de carne y arroz blanco. La última vez que fuimos, mientras esperaba la milanesa probó el atún crudo y sí le gustó. El milagro fue que haya consentido probarlo.

Michael se fue esta mañana a pasar el fin de semana en Beijing y como él siempre se queja para ir al restaurante, hoy fuimos los tres sólos.

Pedimos nuestros platos favoritos y decidimos además probar la parrilla coreana, un plato nuevo que empezaron a ofrecer desde el año nuevo. (El chino, o sea que nada más llevan dos semanas. )

Nos encantó. Viene en una mini-parrilla de lo más cuchi, con una rueda de cebolla y un trocito de pimentón. La carne viene cruda y uno la cocina sobre la parillita. Andreína fascinada. Quiere traer a su hermano y brindarle una para él solito


lunes, 11 de febrero de 2013

Me las puse rojas

En Venezuela, nos ponemos las pantaletas amarillas el 31 de diciembre para asegurar buena suerte en el año nuevo. ¿Es igual en otros países latinoamericanos?

En China también solo que las pantaletas son rojas porque el rojo es color de la buena fortuna. El Año Nuevo Chino fue el domingo y lo celebramos esquiando como todos los años desde que descubrimos que la montaña queda sola porque los chinos reciben el año en casa.

El año que empezó ayer es el año de la serpiente. Ese es mi signo en el zodiaco chino. Mis asistentes chinas me dicen que uno debe cuidarse en el año de su signo pues ese es un año de mucha dificultad; o sea que para mí, el Año de la Serpiente podría convertirse en el Año del Culebron. ¡¡Ojalá que no!! Ya con los zarpazos que me dio el Año del Dragón tuve suficiente.

Para protegerme, una de mis asistentes me regaló medias rojas. Supongo que pantaletas sería demasiado íntimo. Me las puse en la víspera por sí acaso.



domingo, 3 de febrero de 2013

Año nuevo chiquito - Xiao Nian

Hoy es el 23vo día del último mes del calendario chino lunar. Los chinos lo llaman el año nuevo chiquito, Xiǎo Nián. Hoy es la presentación anual de los dioses de la cocina al Emperador de Jade.

Cada familia tiene su Dios de la Cocina, Zaoshen. Esta encargado de vigilar el comportamiento de la familia durante el año. Hoy viaja al cielo a entregar su reporte al Emperador de Jade. Dependiendo del reporte que dé Zaoshen, será buena o mala la suerte de la familia en el año que empieza.

Para garantizar que el reporte sea dulce, las familias le hacen ofrendas de frutas a Zaoshen en sus casas y le embarran la boca con melaza o con miel. También ésta es la noche en que empiezan los fuegos artificiales. 

Este año con la contaminación tan fuerte y con frecuentes e inusuales nevadas, no habíamos visto los tarantines que venden los fuegos artificiales hasta hoy. Los pobres vendedores tuvieron que montar paraguas sobre sus mercancías pues nevó desde la medianoche sin parar, una nieve bien mojada y pegajosa. No hay mucho estruendo de triquitraquis todavía, asi que me imagino que la gente esperará a que escampe antes de empezar.  **** No, nada de esperar. Ahí va el vecino.

En mi casa, Dios hay solo uno y cuida la cocina, la sala, las habitaciones, baños y balcones, lo grande y lo chiquito. Si quisiera hacerse pasar por deidad china, estará diciendo, "Ecita, mi muchachita, a ver si en el Año de la Serpiente le terminamos de enderezar la pierna del marido y la cuenta de ahorro a los dos."

Adiós, Año del Dragón. Nos trataste medio mal, tate. Cuídate en la bajadita. Te queda poquito.



Este collage lo fabricó la maestra de arte en el colegio. Para hacerlo, empleo tres docenas de platos de cartón, mucha tempera y 17 muchachitos de prekinder.  Les quedó de espectáculo.

miércoles, 30 de enero de 2013

Esquiando para arriba

El fin de semana pasado fuimos a esquiar a Wanlong. Nos hacía falta, entre el trajín del colegio, el aire súper contaminado y que no habíamos ido desde diciembre. A Scott es quien le hace más falta. El sueña con pasar los días en montañas nevadas - cuando no está soñando con fogatas en la playa.

Se está recuperando bien de su cirugía. Ya lleva 9 meses desde la operación y camina sin muletas. Se cansa menos y puede aguantar estar de pie casi como una persona normal. Ahora está pensando que necesitará hacerse la misma operación en la otra pierna. ¡Uyyyy! Dos años más en ésto. ¡Menos mal que nada más tiene dos piernas!

Como no puede esquiar de bajada por el peligro de caerse y deshacer todo el progreso hasta la fecha - además que el músculo sigue un poco débil - ha decidido esquiar para arriba. A sus esquís le pone unas tiras peludas que impiden que el esquí se resbale para abajo. Es como la piel de un pez. Si se soba en la dirección de las escamas es liso, pero si se intenta en contra-dirección, las escamas se levantan en oposición. Total que puede esquiar hacia arriba. Se empuja un poco en las partes más empinadas con los bastones de esquiar y para bajar, se monta en la silla del teleski.

El me dice que es excelente ejercicio cardio-vascular. Se viste con la chaqueta, el sombrero y los guantes más ligeros porque le da muchísimo calor. Desde la base de la pista hasta el albergue que está en la cima de la montaña le toca una hora. Una vez allá arriba, se desnuda, se limpia el sudor con una toalla y se viste con ropa seca. Se toma un café y luego, sale a caminar con sus zapatos de nieve por otra hora.

Yo impresionada por el compromiso con hacer ejercicio. Comparto su amor por las montañas nevadas, pero las prefiero facilitas de bajada sobre esquís o como paisaje frente a mi ventana. He estado tratando de convertir la frase "esquiando para arriba" en una metáfora de la vida, algo así como que uno se esfuerza y luego como recompensa tiene la vista desde la cima y la alegría del descenso, pero nada, no me sale. Eso sí, para arriba, para abajo, a donde sea, acompañando al hombre. Dios me lo bendiga y me lo tenga así de fuerte por muchos años más.


 No sé si lo ven en la primera foto del collage. Esa la incluí para que se viera la pendiente de la montaña. No parece mucho, pero créanme que sí lo es. El perro es de unos amigos. Andreína aparece en el albergue, esperando a su papi.

miércoles, 16 de enero de 2013

2 embajadas, 4 pasaportes, 8 horas laborales y lo que vino antes

Hoy fuimos a Beijing a hacer diligencias para los pasaportes de los cuatro. Ayer en la noche pensé que estaría escribiendo la entrada sobre las diferencias en el tratamiento que nos brindarían en la embajada americana y la venezolana, pero eso fue antes de levantarnos de madrugada y encontrar que se nos metieron ladrones a la casa mientras dormíamos.

En nuestro centro residencial habían robado a unos compañeros de trabajo y a la familia de uno de nuestros estudiantes el año pasado. Igual que a nosotros, de noche mientras dormían entraron por una puerta trasera y salieron llevándose todos los electrónicos portátiles. Desde entonces habíamos guardado todo de noche, trancado todas las puertas y ventanas y cerrado las cortinas. Justamente anoche Michael y Andreína sin razón dejaron sus laptops sobre el sofá. Como estaban cargando sus iPods, esos estaban conectados a las computadoras.

Cuando me levanté, bajé a desayunar y a guardar el dinero que anoche había sacado del banco porque lo necesitaríamos para las diligencias. No lo encontré y pensé que había estado distraída en el cajero y había perdido el dinero camino a casa. No fue hasta que Andreína empezó a buscar su iPod que nos dimos cuenta que no estaban las dos computadoras de los niños, sus ipods ni todo el efectivo en nuestras carteras, incluyendo un poquito que nos había sobrado de Malaysia y Singapur.

A todas estas muy pendientes de que no podíamos perder las citas con las embajadas. Llamamos a la gerente de personal del colegio y ella se encargó de llamar a la policía. Hablamos con ellos desde el tren a Beijing por medio de su traducción. Yo de broma pude explicarle al chofer y la ayee (la doméstica) lo que había pasado.

Hicimos nuestras diligencias en la capital muy conscientes de la suerte que tuvimos que sólo se llevaron cosas materiales. En ambas embajadas nos trataron bien, pero para el pasaporte venezolano tengo que esperar dos meses y para el americano sólo dos semanas. Todos estamos bien aunque con espíritus deprimidos.

Scott está furioso de que alguien invadió su territorio. Los niños están tristes de haber perdido sus aparatos, y sobre todo Michael que es un nerd de primera orden. Yo lo que estoy es aliviada. Ya me hurtaron la casa. Había pasado el año preocupada pensando que nos robarían como a los vecinos, pero, ya pasó y salí de eso. Es como estar vacunada. Ahora que sean ladrones varicélicos y que no vuelvan.

La foto tomada hoy frente a la embajada venezolana. El árbol de Navidad lo reciclaron para celebrar el año nuevo chino. Por cierto que este año que viene es el de la serpiente, mi signo zodiacal. Ya me habían dicho mis asistentes que en el año de uno hay que cuidarse, pero cónchale como que empiezo temprano. Todavía falta un mes más del año del dragón. Ni modo, a ponerme las pantaletas rojas en la víspera del año.

Sorprendentemente delicioso

Les he contado antes de mis alergías. Después de verme con el médico chino que me recetó zanahorias fritas, acudí al hospital internacional en Beijing donde consulté a una doctora estadounidense. Ella me recomendó hacer una dieta de desintoxicación seguida por una de eliminación para ver cuales son los alimentos que más me afectan.

Sigo en la fase de desintoxicación. La empecé el primero de enero y me toca semana y media mas. En los últimos seis meses estaba sintiendo que le tenía alergia al acto de comer, porque todo me sentaba mal, pero ahora que he eliminado todo me siento casi normal.

El platillo principal de la dieta es un batido verde. La receta más abajo, pero tiene mucha espinaca y col. La primera vez que la hice fue con mucha duda. La pobre se vé guácala, asi que fue sorpresa encontrar que es deliciosa. Hoy no tenía casi espinaca porque me tocaba ir al mercado después del desayuno, y la hice menos verde. No quedó tan sabrosa, otra sorpresa.

Receta del batido verde

5 hojas de col rizada
5 hojas de espinaca
1 manzana sin semillas y cortada en trozos
1 pera sin semillas y cortada en trozos
1 trozo de jengibre pelado

La col y la espinaca para la desintoxicación. Se le puede agregar una hoja de diente de león para lo mismo. La fruta para el sabor. El jengibre como anti-inflamatorio. 

Primero se licúan la manzana, la pera y el jengibre con 2/3 taza de agua. Se le agregan las hojas y se licúa bien, unos dos minutos, a alta velocidad. Se vierte y se toma inmediatamente. También se le puede agregar unas semillas que los chinos llaman goji, previamente remojadas. Esas semillas tienen mucha vitamina C y antioxidantes. Otro ingrediente posible es semillas de linaza molidas para aumentarle la fibra pero yo ya con la espinaca y la col tengo suficiente.

Eso de tomárselo inmediatamente es en serio. Si esperan mucho, la espuma verde flota encima del jugo y cuando vayan a tomárselo la sorpresa será que el jugo se les derrama encima cuando están esperando probar espuma. Lo digo por experiencia.

Surprisingly delicious

La foto con el teléfono, editada con un programita llamado Photogene. Creo que el efecto de desenfoco lo debí haber centrado un poco más arriba, pero ni modo. La intención era quitarle la atención a la bolsa de carlotinas que está detras de la licuadora. (No son parte de mi dieta, pero a mis hijos les encantan.)



La receta y la dieta me vienen de un libro, The Whole Life Nutrition Book, por Alissa Segersten y Tom Malterre. También tienen una página web con más recetas de batidos y comidas sin gluten. No he quedado muy impresionada con las recetas excepto con ésta, asi que no es que les recomiendo el libro pero tampoco es que es tan malo. Si quieren una copia ligeramente usada, la mía se las vendo.

Actualización al 5 de marzo de 2014: Me resulta mas fácil digerir esta bebida si le cuelo los sólidos pues terminó siendo demasiada la fibra que estaba ingiriendo y me empezó a producir muchos gases estomacales. Además, me diagnosticaron alergía a la manzana por lo que ahora hago la bebida con peras solamente. Igual queda rica y ahora no tengo que preocuparme porque se me derrame la espuma encima. 

sábado, 12 de enero de 2013

Mis sitios favoritos en el 2013

Pasamos unas lindas vacaciones en Singapore y Tailandia, y al regresar a Tianjin, nos tocó una semana y pico en casa. No hicimos casi nada. El primero de enero fuimos a montar sillas de hielo - anécdota para otro día - y después de eso a practicamos el arte de no hacer nada. Francamente, fue la mejor parte de mis vacaciones.

Esa primera semana de enero re-descubrí dos lugares que me gustaron mucho en el 2012: IKEA y el mercado de verduras en Pingyan Nan Dao.

De IKEA que se puede decir. Hay de todo. Como dice mi amiga Lidia, está lleno de millones de periquitos que no sabía que necesitaba. Es como una cueva de Aladino, ¿verdad? Como los chinos no están de vacaciones hasta dentro de tres semanas, porque ellos no celebran Navidad ni el 31 de diciembre, me tocó visitar IKEA yo solita. Bueno, la primera vez fuí con Andreína porque justamente íbamos a comprarle unas sábanas. Ella y yo curucuteamos por toda la tienda, pero eso sí, nada de la sección infantil que ella no permitió ni siquiera que se lo mencionara. A los diez años una ya es una señorita, ¡nada de bebés!  Salimos con sábanas de la sección de la gente grande. Hoy me tocó ir a buscar otras cositas y el tesoro inesperado fue una picadora manual requete chévere. Del tiro al llegar pelé como cuatro cabezas de ajo y lo único malo es que no voy a necesitar picar ajo hasta febrero. Malo porque tendré que buscar excusa para usar mi picadora.

Mi otro lugar favorito es el mercado de vegetales de Pingyan Nan Dao.  Cuando nosotros llegamos a China hace 12 años, había muchos mercados al aire libre. En esos mercados se vendía de todo: vegetales, frutas, peces nadando, escobas, telas, papelería, papel toallé, veneno de serpiente, aleta de tiburón y huevos centenarios. El mercado que quedaba cerca de mi casa tenía además de los tarantines, restaurantes, dentistas, cartomancistas de fengshui, peluqueros y hasta adivinos. Era un mini cosmos interesantísimo. A mí me encantaba ir. Pues resulta que como a los tres años de haber llegado nosotros, el alcalde de Tianjin invitó a los alcaldes de otras ciudades del noroeste a una conferencia regional, y el alcalde de Dalián dijo que los mercados libres de Tianjin eran sucios y feos. Aunque fue escándalo, había que darle la razón al señor en lo de lo sucio. Feos no, pero sucios definitivamente.

Derrumbaron los mercados libres y construyeron amplios galpones a donde mudaron a los vendedores. Ahora los mercados son menos fríos y menos interesantes, pero después de los primeros meses, igual de sucios. Ya tampoco hay esa maravillosa variedad. No puedo comprar telas, medias panty y cebollas en el mismo mercado libre, ni tampoco me puedo cortar el cabello o hacer copia de las llaves. Ni modo, menos aventura pero ahora el alcalde de Dalián no tiene tanto de que quejarse.

En el mercado de Pingyan Nan Dao venden verduras, frutas, carne y pescado, especies, nueces y encurtidos. Lo más exótico es que asan los patos a la Pekín y eso solo es exótico para mí. Aún así, es lindo, colorido y limpio.

Una cosa que me choca mucho de China es que no hay pipotes de basura, o por lo menos no hay muchos. Definitivamente no hay uno en cada esquina, como me gustaría a mí. La idea es que que la basura se tira al piso pues habrá algún barredor que lo recogerá después. Por eso es que los mercados antes eran tan sucios: esperando que viniera los recogedores se amontonaba la basura.

En mi mercado favorito no es así. Es un galpón grande y ventilado. En el centro están pasillos con las verduras, las frutas y los peces y mariscos. Por cierto que en China se compran los peces vivos para garantizar que están frescos. Así también era con los pollos y gallinas pero ahora con la preocupación por la fiebre aviaria, no se consiguen sino en mercados especializados. A los lados están los vendedores de especies, encurtidos, comidas preparadas, la señora que asa los patos, y las carnes. (Tip de compra: no hay refrigeración en éstos mercados así que carne sólo compren en el invierno.) Hay pipotes de basura en las intersecciones de los pasillos y los cambian con suficiente frecuencia para que no huelan ni se desborden. Ubicaron los puestos de frutas frente a la entrada principal por lo que uno entra y huele manzanas. Todo limpio y ordenado. Me encanta.

El puesto de verduras que me gusta tiene de todo. Estoy conociendo muchas verduras nuevas y aprendiendo mucho chino. El señor se esmera por explicarme como cocinar sus vegetales - no es que yo entiendo nada, pero como que al señor le gusta cocinar. El puesto de las frutas tiene las cerezas más oscuras que jamás he visto. Todavía están muy caras y tendré que esperar que empiece la temporada, pero mientras tanto la variedad de manzanas y peras es sorprendente. No me he atrevido a comprar un pez todavía. Ellos lo pescan, lo limpian y lo cortan como uno quiera pero tan aclimatizada no estoy todavía.

Como hoy tuve que hacer otras diligencias no pude ir al mercado. Me tocará mañana. Voy a hacer la compra pensando en que puedo preparar en trocitos para usar mi picadora.

Tenía fotos del mercado que tomé con el teléfono pero las perdí. Ni modo. Aquí les pongo mi cena después de hacer mercado en Pingyan Nan Dao: batatas japonesas (son moradas), ensalada de lechuga con zanahoria, espinaca y cebollas caramelizadas. La carne en la esquina la compré en un supermercado, pero el ajo que la adobó vino del mercado. 

Playing with my food...

martes, 1 de enero de 2013

No monto entrada desde el año pasado

Mi primera resolución para el 2013 era montar una entrada hoy, para poder decir que no monto desde el año pasado (fíjense en la fecha de la entrada anterior), pero el año empezó apurado y no tuve tiempo.

Lo que sí alcance a hacer fue salir con mis hijos y mi marido a hacer patinaje de sillas, hablar por Skype con unos amigos queridos y con mi mamá y papá, tomar una siesta, salir a cenar, ir a comprar aguacates, lentejas y comida para acures, ver una película con mi marido y convencer a mi hijo adolescente de darse el primer baño del año. (Les dije que el año empezó apurado.)

Total que los dejo con esta foto linda de hoy, el día más frío del 2013, esperando que su año empiece así de bien y cobran buena compañía.